aquí enfermo de soledad me quedo

Aquí enfermo de soledad me quedo
enfermo de casi todo lo solar
mi sombra se esconde en el polvo
el viento sigue siendo

Impregnado de ausencia está el espejo
impregnado de cualquier cosa
menos de lo que muere y respira
impregnado de esta ausencia de espejo
de esta ausencia brava que me enciende
-no en los sesos
la garganta:
cueva de pensamientos-

brava y bestial, atroz la quemadura
aquí, enfermo de soledad me quedo
con tu silencio ensordecedor
con ese rumor de tu voz ausente
despidiendo sexo
destilando sexo y rubor

y otra vez me miro
intento engañar la soledad de golpe
la soledad se mira en el espejo
tu voz ausente se refleja en el espejo
-de pronto el mundo juega al tiempo-
el mar se estira y
los gatos hacen miau

trato de encender la noche con mi quemadura
con mi voz que madura
-la luna sudando luz de hospital-
cuando la noche toca la puerta
el espejo no se asoma.